En la administración de justicia de La Guajira y el Cesar, Vladimir Daza y Fabián Pumarejo, hacen parte de los controvertidos jueces municipales con funciones de control de garantías señalados por emitir fallos que van, aparentemente, a favor de los que infringen la Ley. Ambos han revocado las medidas de aseguramiento contra el político Ovidio Mejía Marulanda, y el último de esos beneficios se emitió mientras estaba profugo de la justicia.

Daza también revocó la medida de aseguramiento a Tom Socarrás, vinculado al cartel de la chatarrización en Valledupar. Y Pumarejo, al capitán de la Policía Eduardo Andrés Merchán Prieto, acusado de presunta violación a una teniente de la institución, y dejó libre a Damiler Paul Corrales Figueroa, sobrino de Marquito Figueroa.

Uno de los procesos más controvertidos es el de Ovidio Mejía Marulanda, exalcalde de Maicao, acusado por la presunta autoría intelectual del homicidio de Danny Deluque Taborda, en Valledupar, el 15 de febrero de 2012. El viene dando una batalla en los estrados judiciales entre Valledupar y La Guajira desde su detención el 26 de abril del 2018, junto con cuatro integrantes del clan Marquitos Figueroa, culpados de homicidio agravado y concierto para delinquir.

La jueza Verónica Velandia, con funciones de control de garantías, les dictó medida preventiva en el centro carcelario de Valledupar mientras se resolvía la segunda instancia, que fue apelada por los abogados defensores y en el caso de Ovidio Mejía, por el defensor Wilmer Cobo.

Pero, inexplicablemente, el proceso de Mejía apareció en Maicao en el despacho del Juez Segundo Promiscuo Municipal con funciones de control de garantías, Vladimir Daza Hernández, quien revocó su medida de aseguramiento. La Fiscalía apeló esa decisión por considerarla fuera de lugar y porque había serios señalamientos de que Daza, cuando ejerció ese cargo en Urumita (Guajira), suspendió algunas medidas de aseguramiento, entre ellas la de Óscar Tom Socarrás, exsecretario de Tránsito de Valledupar, señalado de estar vinculado con el cartel de la chatarrización.

Según una fuente de alta confidencialidad, el juez Vladimir Daza fue trasladado especialmente para asumir ese encargo y recibió 150 millones de pesos. Y por esos dos casos (el de Mejía y el de Socarrás) está siendo investigado. Estuvo retenido varios días, lo cual hizo que moviera sus fichas para obterner la libertad y poder regresar al puesto, mientras busca la manera de salir ileso de toda investigación.

El 8 de octubre de 2018, el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Maicao le suspendió la libertad a Ovidio Mejía Marulanda y ordenó su regreso a la cárcel, pero él nunca se presentó y se habló de una posible fuga.

El proceso regresó a Valledupar y el Juez Segundo Penal Municipal con funciones de control de garantías, Fabián Pumarejo, revocó la medida de aseguramiento consistente en "detención preventiva en establecimientos de reclusión en favor del dirigente político Ovidio Mejía acusado por la presunta autoría intelectual del homicidio de Danny Deluque Taborda, ocurrido en Valledupar el 15 de febrero de 2012". La decisión sorprendió a la Fiscalía y se supone que está estudiando el fallo.

Jueces con presuntos vínculos con el clan ‘Marquitos’ Figueroa

Vladimir Daza, Juez Segundo Promiscuo Municipal de Maicao, tiene varias investigaciones en contra y la última fue por revocar la medida de aseguramiento a Tom Socarrás, impuesta por un juez de Valledupar. El 24 de octubre del año pasado fue detenido en su despacho en las instalaciones del Palacio de Justicia por prevaricato por acción, en hechos ocurridos cuando se desempeñaba como Juez Promiscuo Municipal de Urumita. La orden de captura la expidió el tribunal de La Guajira a solicitud del fiscal segundo delegado, pero poco después le concedieron su libertad.

Según una fuente (que no quiso revelar su indentidad por temor a represalias) hubo una supuesta negociación entre el juez Roger Reinoso —el mismo que había ordenado la medida de aseguramiento— con Ovidio Mejía y Cielo Gnecco, heredera de la estructura política de su hermano Jorge, que logró recuperar el poder de la familia en el Cesar. Esto, a pesar de los probados vínculos de los Gnecco con paramilitares, narcotraficantes, acusaciones por desvío de recursos públicos y condenas por homicidio.

El presunto cartel de la toga en La Guajira, señaló la fuente, incluye desde magistrados hasta fiscales que se hacen los de la vista gorda para no meterse en problemas, y los jueces nombrados en interinidad por el tribunal llegan con un encargo especifico y al que no acepta sus condiciones, simplemente no lo nombran. “La mafia es grande” —dijo— “nada se puede hacer para acabar con esta corrupción. No todos son iguales, de los nombrados en propiedad hay muchos que lo hacen correctamente, pero los jueces corruptos se las ingenian para que los procesos o negocios les caigan a ellos”.

La historia del juez Vladimir Daza no termina aquí. La Nueva Prensa entrevistó a un testigo protegido de la fiscalía que lo señaló como colaborador de la banda criminal de Marquitos Figueroa.

El contestó las siguientes preguntas por WatsApp:

¿Qué sabe de Vladimir Daza?

Q es amigo de paúl corrales.

¿Por qué lo dice?

Porque yo una vez estuve en una parranda y Bladimir llegó a la parranda q estaba paúl y yo estaba.

¿En dónde fue la parranda y quiénes más estuvieron?

En Valledupar, en la casa de la abuela de paúl en el kiosco, Bladimir, el favor que le ha hecho a la organización es de revocar medidas a Ovidio y otros. Esa organización tiene mucho poder: trabajan con el narcotráfico, tienen estaciones de gasolina, hoteles, fincas Y sobornan a los jueces y fiscales por que aún tienen cómo hacerlo.

¿Qué hablaron en esa reunión?

¡No! ellos hablaron... estaban sentados juntos no se dé q hablaron.

El testigo dijo que teme por su vida y la de su familia, y que le sugirió a la Fiscalía General "retirar los procesos que llevan en esta zona, porque se rumora que se está orquestando todo para sacar a Marquitos Figueroa".Por medio de un derecho de petición, La Nueva Prensa solicitó al Tribunal Superior de Riohacha una explicación sobre los hechos presentados con los jueces investigados en La Guajira y preguntó cuál es el procediemiento para seleccionarlos y nombrarlos. Se negaron a responder y procedieron a intimidar con otro derecho de petición, pidiendo que revelara mis fuentes. Así se evidenció su defensa al juez Vladimir Daza.

Sin embargo, Pedro Alonso Sanabria, presidente de la sala disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura de Colombia, comunicó a este medio que se ya envió un oficio a las seccionales de La Guajira y Cesar, para que inicien las investigaciones del caso.

Fabián Pumarejo, juez de Valledupar, en tela de juicio

Pumarejo fue quien en diciembre de 2018 otorgó la libertad al capitán de la Policía Eduardo Andrés Merchán Prieto, que se presume violó a una teniente de la institución.

Por su parte la periodista Diana López —hija del asesinado excandidato a la alcaldía de Barrancas (La Guajira) Luis López Peralta— escribió en su cuenta de twitter que no es el único caso en que el juez Pumarejo deja muchas dudas. Y este tema ha tomado fuerza, gracias a que supuestamente "no es la primera vez que el abogado es cuestionado por sus decisiones judiciales, como lo recordó. Son varios los casos en los que el juez de Valledupar Fabián Pumarejo decide extrañamente dar libertad, aun habiendo pruebas", haciendo referencia la exalcaldesa del municipio de Chiriguaná (Cesar), investigada por corrupción.

En la lista de sus beneficiarios está Damiler Paul Corrales Figueroa, señalado de pertenecer al clan de Marquitos Figueroa. Pumarejo le revocó la medida de aseguramiento intramural. La decisión fue apelada por la Fiscalía Especializada 21 de Bogotá y el proceso tendrá que ser analizado nuevamente en otras instancias legales en el Palacio de Justicia.

Paul Corrales Figueroa y otros cincos implicados son acusados de conformar una estructura criminal al servicio del considerado capo guajiro Marcos de Jesús Figueroa García, para perpetrar asesinatos y actividades ilegales en la región. Ahora hay que aguardar a que la Fiscalía General de la Nación y sus funcionario de La Guajira y el Cesar y la sala disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura empiecen a dar resultados en sus investigaciones.

Cielo Gnecco y su primo hermano, el asesino convicto Kiko Gómez

El juez Vladimir Daza cuando salió en libertad.

Ex alcalde de Maicao Ovidio Mejía.